Nos cagó el palomo

Jueves, ya se mascujea la salida motera para el domingo por la mañana. Será una ruta ya conocida, más que nada a ver si seguimos tomando curvas, las rectas, empachan. Hasta el sábado por la mañana parecía que al menos nos juntaríamos doce motos. Finalmente hemos ido na más que ocho. La ruta ha transcurrido con la normalidad habitual y el nivel de disfrute, también el habitual. Ha bienvenido gente nueva, gente que al parecer, se lo pasan bien con el grupo que salen habitualmente pero acaban diciendo, para la próxima que hagáis avisadnos. Algo debe pasar, porque esa petición se repite de cuando en cuando. Como otras muchas veces hemos estado por la zona de Ávila, por donde nosotros vivimos es todo llano y nada más que rectas. Hemos de hacer al menos 45 km para empezar a disfrutar bien de la moto.

Nos lo hemos pasado tan requetebien.

El título del post viene a colación porque donde aparcamos las motos en El Barraco había ocho motos, el palomo o paloma en cuestión no tenía motos a las que dirigir su culo que a la nuestra, jodío bicho. Pero bueno, no ha sido como para cortarse las venas, nos las dejaremos largas.